Debido a la fuerte pendiente que presenta la parcela se plantea la entrada por la cota más alta, construyéndose por debajo de ésta un semisótano que se abre hacia el sur, de forma que la vivienda se adapta al terreno y se obtiene la mejor iluminación solar. Además así se consigue la conexión hacia el exterior desde el salón-comedor y la cocina.
La posición de la entrada viene determinada asimismo por la propia posición de la edificación, planteándose dos plazas de aparcamiento próximas a ella y separando las áreas exteriores públicas (norte) de las privadas de disfrute (piscina al sur).
El desarrollo volumétrico en el interior se configura alrededor de la escalera y en el exterior se incorporan elementos basados en los sistemas tradicionales de la arquitectura popular. El tratamiento de la luz, tanto la natural gracias a las grandes cristaleras que inundan los espacios de día, como la artificial empotrada, integrada, casi naciendo del propio edificio, busca fundamentalmente potenciar esa sensación del espacio diáfano en diálogo con el entorno.
Montrove, Concello de Oleiros, A Coruña
2003 (fin.2007)
232,47 m²
Arq. Residencial unifamiliar